El dolor de estómago provoca una sensación incómoda que puede aparecer de forma repentina o ser una molestia más frecuente. En cualquier caso, siempre hace que nos preguntemos: ¿qué lo está provocando y cómo puedo aliviarlo?
Desde una mala digestión, problemas digestivos hasta el impacto del estrés en tu cuerpo, entender las causas es el primer paso para sentirte mejor. En este artículo, te explicaremos las posibles razones detrás de tu dolor de estómago, los síntomas asociados y consejos prácticos para aliviarlo.
Causas comunes del dolor de estómago
El dolor de estómago puede tener diferentes orígenes, pero estas son algunas de las causas más habituales:
- Indigestión: comer en exceso o consumir alimentos pesados puede generar malestar en la parte superior del abdomen.
- Gases: la acumulación de aire en el sistema digestivo puede causar distensión abdominal, hacer que sientas hinchazón abdominal y molestias incluso en la boca del estómago.
- Estrés o ansiedad: los factores emocionales prolongados en el tiempo también pueden alterar la función digestiva.
- Intolerancias alimentarias: problemas como la intolerancia a la lactosa o al gluten pueden causar dolor abdominal. Aunque son las más habituales, es necesaria una prueba para conocer exactamente qué alimento es el que está provocando el dolor de estómago.
- Infecciones gastrointestinales: virus o bacterias, como en la gastroenteritis, generan dolor junto con náuseas o diarrea.
- Cólicos menstruales: el ciclo menstrual puede estar acompañado de molestias abdominales.
Síntomas asociados al dolor de estómago
Estos son otros síntomas que suelen aparecer junto con el dolor de estómago, a los que debes prestar atención:
- Vientre inflado: la acumulación de gases puede causar una sensación de hinchazón, común tras comidas copiosas o alimentos difíciles de digerir.
- Gases: cuando su producción aumenta significativamente, los eructos y flatulencias suelen ser señales de que la digestión no está siendo fácil o que has comido alimentos que los provocan en mayor cantidad.
- Náuseas: una sensación de malestar que puede derivar en vómitos, a menudo vinculada a infecciones, atracones de comida o intolerancias.
- Fiebre: si aparece fiebre junto con el dolor, es probable que haya una infección o inflamación en el sistema digestivo.
Consejos para mejorar la salud digestiva
Cuidar tu sistema digestivo puede prevenir futuros episodios de dolor de estómago (salvo los que provengan de una enfermedad o infección). Aquí tienes algunos consejos útiles para cuidar tu salud intestinal:
- Lleva una dieta equilibrada: incluye alimentos ricos en fibra, verduras a diario y evita los ultraprocesados.
- Come despacio: tomarte el tiempo necesario para masticar mejora la digestión y evita la acumulación de aire.
- Evita ciertos alimentos: identifica los alimentos que te causan malestar, como por ejemplo los lácteos o las frituras, y limita su consumo.
- Mantente hidratado: beber suficiente agua favorece el tránsito intestinal y reduce molestias.
- Haz ejercicio ligero: actividades como caminar después de comer ayudan a mejorar la digestión.
¿Cómo los probióticos pueden ayudar con el dolor de estómago?
Los probióticos son microorganismos vivos que desempeñan un papel fundamental en la salud intestinal, ayudando a prevenir y aliviar el dolor de estómago. Su principal beneficio radica en su capacidad para equilibrar la microbiota intestinal, esencial para tu salud digestiva. Un desequilibrio en esta flora puede provocar molestias como hinchazón, gases, estreñimiento o diarrea, que a menudo están relacionadas con el dolor estomacal.
Además, los probióticos favorecen la motilidad intestinal, regulando el tránsito de alimentos por el sistema digestivo. Esto es especialmente útil para quienes padecen problemas como el estreñimiento o la diarrea, que pueden desencadenar dolores abdominales. También son efectivos en la digestión de alimentos complejos, al producir enzimas que facilitan su descomposición.
Por último, los probióticos refuerzan la barrera intestinal y reducen la inflamación causada por bacterias dañinas o infecciones, ayudando a aliviar el dolor asociado a estas afecciones. Incorporarlos en la dieta, ya sea a través de alimentos ricos en probióticos o con complementos como los de YOVIS, contribuye a mejorar la salud digestiva y prevenir molestias recurrentes.
Cuándo consultar con el médico si tienes dolor de estómago
Aunque la mayoría de los dolores de estómago no son graves, hay señales que indican que debes buscar atención médica:
- El dolor persiste más de dos días o es muy intenso.
- Aparece acompañado de fiebre alta, vómitos frecuentes o diarrea prolongada.
- Hay sangre en las heces o en los vómitos.
- Si experimentas pérdida de peso inexplicada o dificultad para tragar.
- Sientes un dolor repentino y agudo en el abdomen.
Preguntas frecuentes sobre el dolor de estómago
¿Cuándo es preocupante el dolor de estómago?
Cuando el dolor no mejore a lo largo del día y si está acompañado de síntomas como fiebre o vómitos, o es demasiado intenso para tolerarlo.
¿Cuánto tiempo puede durar el dolor?
Depende de su causa. Los dolores leves por indigestión suelen desaparecer en unas horas, mientras que los relacionados con infecciones o inflamaciones pueden durar varios días.
¿Qué alimentos ayudan a evitar el dolor de estómago?
Alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras y cereales integrales, junto con los que tienen un alto contenido en probióticos (como el yogur, kéfir o chucrut) pueden mejorar tu salud intestinal, equilibrar la microbiota y prevenir molestias.
¿Es normal tener dolor de estómago por el estrés?
Sí, el estrés puede alterar la función digestiva y causar molestias, como dolor o sensación de pesadez. Consulta con un profesional de la salud.